Mercado eléctrico

Con el nuevo pico de la luz que hemos sufrido esta semana con el precio eléctrico y con todo el revuelo que se está produciéndose por las constantes subidas del precio de la luz, nos lleva a plantearnos si conocemos realmente el mercado, si conocemos las diferentes posibilidades que existen y como se regulan cada una de ellas.

Es fácil que muchos de nosotros no sepamos realmente si estamos en un sistema u otro de regulación eléctrico y tampoco cómo se calcula nuestra factura, o qué factores afectan al precio de la luz que nos cobran a final de mes.

En el mercado existen dos tipos diferenciados desde hace años de contratación de la luz. Por un lado, está el sistema tradicional que se denomina mercado regulado y por otro, el sistema que es más reciente el cual se denomina mercado libre.

Qué son y qué diferencias tiene cada uno de ellos.

  • El sistema tradicional: sistema regulado.

Antes tarifa de último recurso (TUR) y ahora Precio Voluntario al pequeño consumidor (PVPC).

Ésta es una tarifa de precio variable. La parte fija de la tarifa (los peajes) los marca el Gobierno, y la parte variable de la compra-venta de energía la establece Red eléctrica de España (REE) . No pueden ofrecer servicios o descuentos, que encarecen innecesariamente tu factura, solamente el bono social el cuál te puedes beneficiar si cumples una serie de requisitos.

El precio es variable porque se va fijando cada hora en función de lo que marca el mercado mayorista. En las horas de más demanda sube, y en las de menor demanda el precio es más bajo. Notaremos especialmente variaciones en función de la época del año. En invierno será más cara la luz mientras que en verano notaremos que baja.

La tarifa PVPC pueden solicitarla todos los consumidores con una potencia contratada que no supere los 10 kW, pero únicamente pueden ofrecerla las Comercializadoras de Referencia.

Aunque es cierto que esos vaivenes en el precio de la luz puede darnos algún susto en la factura los meses en los que más suba el precio de la luz, en el largo plazo lo normal es que ahorremos más con la tarifa de previo variable como el PVPC que con un precio fijo del mercado libre.

Ventajas: Pensada para proteger al consumidor ya que el precio está regulado y es público, bono social si te puedes acoger y no incluye servicios de mantenimiento.

Desventajas: No hay un precio fijo para un periodo de facturación, el cliente desconoce el coste de la energía, no se aplican descuentos al precio establecido y la inestabilidad al tener que comprobar los precios para adaptar el consumo.

  • El sistema más reciente: Mercado libre

Aquí están las tarifas de las casi 100 comercializadoras del mercado libre.

El precio lo fija la empresa, que lo publicita y lo pone en tu contrato.

Suelen ofrecer tarifas donde el precio de la luz es más estable que con PVPC. De esta forma generan una estabilidad en los precios y así huir de la variabilidad del mercado regulado.

También son libres de ofrecer descuentos, ofertas y servicios adicionales a los clientes. Que en muchas ocasiones, dicho sea de paso, suelen ir acompañados de permanencias en la compañía.

En cualquier caso, estos precios prevén las variaciones del precio durante el año y aplican un margen de seguridad. Y es precisamente por eso que al final del año acabaremos pagando más que con una tarifa de precio variable.

Ventajas: Precio fijo para un periodo de tiempo, suelen incluir descuentos para rebajar el coste y el usuario conoce el importe desde el primer momento.

Desventajas: El precio puede ser más caro al prever las comercializadoras las variaciones anuales y se suelen incluir servicios de mantenimiento.

¿Se puede cambiar de un mercado a otro?

Sí. La liberalización consiste precisamente en eso: en que puedas elegir. El mercado libre tiene sus puertas abiertas para quien quiera abandonar la tarifa PVPC. Y los que están en el mercado libre pueden irse al regulado si su potencia no supera los 10 kW.

El usuario del mercado eléctrico puede contratar la luz en cualquiera de los dos sistemas, pero tiene que tener en cuenta las características de cada uno y sobre todo ver qué ventajas o inconvenientes pueden derivarse a largo plazo.

Conclusión

La Red Eléctrica de España (REE) es la encargada de establecer el precio regulado o PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor). La diferencia principal frente a los costes del mercado libre está en que, mientras que este es un precio marcado por las empresas y, por lo tanto, dependiente de sus intereses económicos, el PVPC cambia cada hora según varios parámetros, entre ellos el consumo energético.

Los precios de la tarifa regulada, por tanto, son por norma general más justos, pero también tienen el problema de verse afectados por condiciones meteorológicas adversas. Sin embargo, el consumidor tiene la ventaja de que cualquier reclamación con respecto a sus recibos puede dirigirse a las administraciones públicas. En el caso del mercado libre, al depender únicamente del sector privado, esta puerta está cerrada para los usuarios.

Además de analizar qué tarifa tienes contratada, es importante que revises si la potencia que tienes contratada se adecua a tu consumo, ya que es posible que tengas contratada una capacidad superior a la que necesitas y, por lo tanto, estés pagando de más.

Espero les haya sido útil el artículo. Pronto publicaremos más artículos que pueden ser de su interés.

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Iñaki Iribarren García

Abogado MICAP 2327